- Paniamor, Universidades, Colegios Profesionales, lanzan advertencia.
Nuevos recortes presupuestarios a inversiones que servían para apoyar a niños y adolescentes, preocupan a la Mesa de Trabajo por una Agenda Social para los Cuidados de las Niñas, los Niños y las Personas Adolescentes en Costa Rica, quienes hacen un llamado a la revisión de algunas decisiones.
Alimentación, vestido, vivienda digna, salud, servicios públicos y cuido, son algunas de las necesidades básicas que se deben subsanar al ser responsable de un menor de edad, pero también están aquellos vinculados a su desarrollo integral, tales como: atención de salud especializada, recreación, educación, entre otros.
Estos son los que se podrían estar poniendo en riesgo para personas en estado de vulnerabilidad, en momentos en que la pobreza infantil y adolescente alcanza un alarmante 38% de toda la población menor de edad en Costa Rica.
Según indicaron los integrantes de la mencionada mesa “en la circular PANI-DPRO-CIR-030-2023, del 21 de diciembre de 2023, se comunica el acuerdo tomado por la Junta Directiva del PANI en el que se instruye que el subsidio mensual de la modalidad de Acogimiento Familiar con Subvención (AFCS) disminuirá de 132 mil a 109 mil colones para personas sin condiciones de salud especiales, lo que representa una reducción del 17,31%. Por otra parte, el monto para niñas, niños y adolescentes con discapacidad pasará de 158 mil colones a 123 mil colones, para un 21,87% de disminución”.
Esto podría significar que para el año que estamos iniciando no se abrirán nuevos cupos en los programas mencionados, lo que se traduce en que aumentará la lista de espera de niñas, niños y adolescentes que podrían estar bajo el cuido de una familia, en lugar de una alternativa institucional.
“En términos prácticos esto implica que, si no hay cupos disponibles, las oficinas del PANI (que gestionan una alternativa de protección cuando se han vulnerado los derechos de una niña, niño o adolescente) seguirán refiriendo a albergues institucionales o a organizaciones de cuido residencial (donde también existen listas de espera), las cuales, pese a sus esfuerzos, no pueden sustituir la atención y cuidados brindados en un entorno familiar. Aunado a esto, si un cupo queda libre y no se llena rápidamente, se cerrará del todo y ya no podrá ser usado”, indicaron.
Lo que preocupa es que hay evidencia de lo que esto puede generar, ya que si se continúa por esta línea y se dan más recortes del tamaño de estos, en un contexto de recuperación económica nacional pueden significar una peligrosa incomprensión del papel crucial que juegan las inversiones sociales en niñez y adolescencia en el desarrollo humano de toda la población a largo plazo.
“Esto es muy delicado porque, como lo demuestran varias evidencias científicas recientes, las inversiones en desarrollo humano temprano son las más eficaces y tienen un impacto sustantivo a largo plazo, pues una experiencia de protección, atención y educación apropiadas durante la niñez y la adolescencia tienen un efecto protector que se extiende a toda la vida de la persona”, afirmaron los representantes de diferentes organizaciones sociales.
Desde siempre se ha sabido que el combate a la pobreza es fundamental para cualquier país, así como motivar la movilidad para que las personas puedan salir de ese duro panorama.
“Bajo condiciones de pobreza, el ser humano no puede desarrollarse apropiadamente a ningún nivel, pues se generan rezagos y bloqueos gravísimos en años cruciales de la vida que afectan a nivel físico, cognitivo, emocional, conductual e integral, impidiendo a la persona adquirir las habilidades y conocimientos que necesita para progresar, sostenerse y superarse a lo largo de toda su vida”, agregaron.
Es por ello que piden que se reflexione sobre lo que se está decidiendo y a lo mejor se logre replantear para que los niños, niñas adolescentes que más ayuda necesitan no salgan perjudicados.
Dicha mesa está conformada por organizaciones como Paniamor, Aldeas Infantiles SOS, Word Vision, Colegio de Psicólogos, Colegio de Trabajadores Sociales, Colegio de Orientadores, UCR, UNA, entre otras, las cuales buscan hacer ver que no es correcto realizar recortes a la población más vulnerable del país.